Historia de la fragancia: La inocencia del primer amor se da a conocer con la jugosa madreselva y la lujosa rosa suavemente acariciada por la dulzura del delicioso acorde de azúcar de malvavisco, que satisface el anhelo del nuevo amor. Una cálida base de ámbar aporta un toque pulsante de sensualidad, insinuando la posibilidad de conocer pronto otra alma, por dentro y por fuera.
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